Tras la mirada

Aqui aparezco con mi padre, el hombre que me ha enseñado lo que se, que me ha hecho ser como soy, y del que me siento increiblemente orgullosa.

Tras esa mirada sonriente, se ocultan arrugas producidas por el tiempo, canas que han ido saliendo por las preocupaciones, y una sonrisa escogida entre muchos momentos para ocultar todos los sueños rotos, todas metas que se puso y no consiguió y todas las cosas que perdió con el paso de los años.

A su lado estoy yo, dando gracias cada dia por tenerlo a mi lado, por regalarme el mejor padre del mundo, y el que siempre me apoya, me escucha, me aconseja y me cuida.

Hoy he vuelto a desayunar con el, como hago muchas veces, un besito papi.