Un golpe de suerte

Una preciosa e increible brisa hizo que estuvieramos juntas, el destino barajo las cartas y gracias a eso nosotras mantuvimos nuestra amistad, como jovenes amantes, enamoradas de los amigos, de la vida y fuertes olvidabamos la distancia para correr a mirar el buzón y esperar noticias tuyas. Es cierto que estabamos lejos, no podiamos vernos, pero hay reside la magia en que jamás te sentí lejos, siempre nos encargamos de mantener viva la llamita que esperó que fueramos mayores.
Con la inlusión de la niñez, la fierza de la adolescencia pasastes a mi lado a la madurez, con la ternura del principio, la calidez de los años y el cariño y la comprensión de la vida y las circunstancias.
No es la primera vez que te nombro, y no sera la ultima, porque te necesito para tener buenos pensamientos, te necesito para unir mi fantasia con mi realidad. Me permites disfrazarte de caballero y luchar con tu espada contra los dragones.
Somos dos princesas con armaduras, me dejas sentarte en una cateria, tomarte la mano y mirarte, y no hace falta nada más, te siento a mi lado y me basta lo demás.

Eres la amiga que siempre tuve, esa persona que conoce tu vida, y la respeta y la apoya e incluso te escucha y te aconseja cuando te equivocas y te tiende su mano para volver a sacarte una sonrisa.
Una tarde a tu lado es el equivalente a un balneario sumado a un fin de semana con la familia y a una semana de sáfari, porque una tarde contigo es tener la tranquilidad de estar segura con alguien que te quiere y te respeta y que cada segundo ofrece una nueva emoción y anécdota.

Ver como hay personas que se llaman "amigos" y lo que hacen es bombardear y dar más problemas, que solo te llaman cuando les interesa y no comprenden que eres feliz, que ahora las cosas te van bien y encima en vez de alegrarse les da ravia, me hace valorar, apreciar, adorar a las personas a las que yo llamo "amigos", se que son pocos pero... la calidad cuesta encontrarla.

Asi que te dedico una frase que nos describe a las dos "Soy tan adulta, que reconozco lo duro de una vida, el pesar de una enfermedad y la importancia de una familia. Soy tan adulta que me puedo permitir pensar en hadas, tener ilusiones y ser feliz por tener los pies en el suelo y poder volar"